Interacciones y sinergias entre ODS: un análisis desde la responsabilidad social en Colombia.
- MIRYAM DAYANA MENDIVELSO CHAPARRO
- 4 nov 2021
- 2 Min. de lectura
Titulo:
Autor(es) del artículo:
-Óscar Iván Pérez.
-María Claudia Romero.
- Paola Vargas González.
Fecha de publicación: -Recibido: mayo 06, 2020
-Aceptado: septiembre 22, 2020
Dirección Web: https://revistas.uniandes.edu.co/doi/full/10.13043/DYS.86.6
Palabras clave:
- Desarrollo económico y social.
- Análisis cualitativo.
- Sostenibilidad.
- Colombia.
Cuerpo de la reseña:
El artículo trae consigo la respuesta que dan los 44 programas de responsabilidad social de organizaciones del sector privado en Colombia, para deliberar como efectúa una solución de la Agenda 2030, de acuerdo con la concepción de las Naciones Unidas.
Aun así se considera que Colombia ha sido responsable de al menos tres objetivos particulares, económicos, sociales y de gobernanza, mucho o poco, son los enfoques preliminares que las empresas privadas consiguen desarrollar mejor, sin embargo la ODS prefiere inspeccionar sobre el capital social, el planeta, la prosperidad, la paz y las sociedades internacionales con efectos de resolver las anteriores mencionadas.
Colombia particularmente responde de forma diferente a cada una, por ejemplo el capital social y la prosperidad la soportan como un entendimiento de relación con el crecimiento económico, entre más empresa y desarrollo, mejor inversión en la prosperidad y bienestar social; La paz, es un arma de doble filo, por cuanto rendimientos se quieren dar, alguno dirán que si otros que no, lo cierto es que en cifras, parecer ser que Colombia ha logrado disminuir el conflicto armado y finalmente la paternidad de países desarrollados es una cuestión externa, de la voluntad de colaborar con la nación, de ser así, es igualmente Colombia invitada y admitida dentro de los más de 190 países que conforman las Naciones Unidas y hace presencia en los conglomerados por el desarrollo mundial.
Conclusiones:
La discusión está abierta a las perspectivas de los actores involucrados, de sí Colombia es o no un promotor de los ODS y la Agenda 2030, es cuestión de cifras y números, el país se defienda a su manera y sustenta la RSE que ejecuta desde un canon económico y gubernamental.
El hecho de que el sector privado es más reactivo que proactiva, tiene que ver con una construcción de cumplimiento, es decir, se limita a cruzar la línea de solidaridad por lo mínimo, no es que Colombia no cumpla, sino que presenta un esquema perezoso para con otros países y podrían mejorar su sistema de RSE, si así lo quisieran.
Apreciaciones: personales:
Aunque los autores tratan de ser altamente imparciales y se les felicita por ello, pues no es fácil; aun así dejan abierta la puerta para identificar las falencias de RSE del conglomerado privado que marca la economía de nuestro país, ni aun con las multinacionales, intervenidas por actores internacionales, tienen potestad de mejorar las condiciones de su país anfitrión, por tanto se podría considerar que los sistemas asociales desmotivan a las empresas a invertir, de otra forma no se justifica la falta de pertenencia por la región. Con esta motivación, se entiende que no tienen una cultura presta a comunitarismo, pueden llegar a ser bastante individuales y poco solidarios, cuando se trata incluso de su propio beneficio.
Comments